Mitos y Leyendas
Continuaremos nuestro recorrido por el "Reto 1", leyendo el texto
" Medusa "
Antes de leer, imagina cómo una mujer se convierte en un monstruo temido por todos; mientras lees, descubre las emociones y decisiones que la llevaron a su destino; y al terminar, reflexiona sobre cómo la venganza y el poder pueden cambiar el curso de una vida.
​​Medusa era originalmente una hermosa doncella sacerdotisa del templo de Atenea, pero cuando fue violada por Poseidón, en el mismo templo, la enfurecida diosa, no pudiendo desquitarse con el señor del mar, transformó a la joven, para parecerse a sus hermanas, en monstruo con piel de reptil y con cabello en serpientes. No pudo hacerla inmortal, puesto que para eso requería ser una virgen, entonces en cambio le dio una mirada petrificante. Medusa huyó a la cueva de sus hermanas gorgonas, monstruosas de nacimiento, donde se refugió.
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Muchos héroes se atrevieron a meterse en la cueva de las gorgonas, mas nadie salió nunca, algunos devorados por Euríale o Esteno, otros petrificados por la mirada de Medusa. Perseo, quien aseguró volver con vida y con la cabeza de Medusa, fue enviado por el rey Polidectes de Sérifos a cumplir la misión. Con la ayuda de Atenea y Hermes, que le dieron las sandalias aladas, el casco de invisibilidad de Hades, una espada y un escudo espejado, el héroe fue a visitar las Grayas para que le dijeran donde se encontraba la cueva de las gorgonas. Perseo cumplió su misión, evadió a las hermanas de medusa con el casco, y decapitó a la gorgona acercándose a ella sin mirarla directamente sino observando el reflejo de la gorgona en el escudo para evitar quedar petrificado. Su mano iba siendo guiada por Atenea y así cortó su cabeza. Medusa estaba embarazada de Poseidón, y al ser decapitada, de su sangre salieron Pegaso y Crisaor.
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Perseo sobrevoló el desierto del Sáhara, donde de las gotas de sangre caídas de Medusa, brotaron víboras venenosas y la Anfisbena. Y cuando Perseo salvó a Andrómeda, los corales del Mar Rojo se formaron de la sangre de Medusa que salpicó las algas. Después de todas sus aventuras, Perseo le dio la cabeza a Atenea, quien la colocó en su escudo. La diosa le dio la sangre mágica de Medusa al médico Asclepio, pues la que manaba del lado izquierdo del cuello era un veneno mortal, y la del lado derecho tenía el poder de resucitar a los muertos.